Red nacional de festivales y encuentros haciendo crecer el cine nacional

 

Laura Antillano

Si algo importante ha ocurrido en el país con relación al cine, ha sido la creación de la Red Nacional de festivales y encuentros cinematográficos, en el territorio de la «patente» nacional y la exhibición, tanto venezolana como extranjera, motivando para el surgimiento de nuevos realizadores y produciendo espacios de convocatoria para el crecimiento de la población de espectadores.

Esta «locura» que se suponía impensable por allá en la década de los cincuenta o sesenta, (cuando valientes pioneros de este oficio, se lanzaban solitos, dejando de comer y viviendo a la deriva, para cumplir su sueño de hacer cine), ahora existe y produce una convocatoria nacional que efectivamente puede movilizar la población de muy diversos estratos, a ver lo que hay en las pantallas y a intentar hacer cine desde sus propios espacios.

Se acabó aquello de que el cine de arte, o no comercial, era solo para «entendidos», reunidos en espacios minúsculos, para ver una película que habían localizado con grandes esfuerzos y nadie más se interesaba en ello.

Porque tenemos una Red de unos 54 eventos nacionales, que se llevan a cabo contra viento y marea, en los distintos estados del país, cada uno con un perfil diferente y para diversidad de públicos. Y entre nosotros nos hemos ido conociendo y comunicando, lo que crea acercamientos e intercambios muy productivos.

La Red, creada con el nombre de Sistema Nacional de Festivales y Muestras de Cine (SNFMC), la preside Rita Elena Ávila, quien también tiene a su cargo el Festival de Cine de Maracaibo, el cual tiene carácter de concurso donde participa la ficción y el documental a nivel nacional y de paso, han organizado un diplomado sobre cine en la escuela.

Si revisamos la lista por regiones del país donde se ubican estos eventos, podemos considerar en el mapa la presencia múltiple por región, intentemos pues, un viaje por todos, y así olvidemos alguno, que quede claro que hemos tenido la mejor intención de sumarlos a todos.

Empecemos, por ejemplo, con el Occidente:

La Muestra Internacional de Cine Indígena de Venezuela (MICIV) la han coordinado David Hernández Palmar, Yanilú Ojeda y Leiqui Uriana y tiene sede en el Zulia, desde sus inicios en 2008.

El Festival de Cine de Maracaibo, como dijimos, ha nacido en manos de Rita Elena Ávila y ella lleva la batuta; el de Cortometraje Nacional Manuel Trujillo Durán es patrocinado por el Cine Club de la Universidad del Zulia.

En Falcón, cuyo fuerte es la participación de los niños como creadores y como espectadores, tenemos el Festival de Luces del Alba (la Muestra Audiovisual Latinoamericana y del Caribe, iniciado en el 2012) y la Muestra de los Países del Alba, allí el trabajo fuerte de convocatoria y producción está en manos de Norma Courlaender, quien es la sacerdotisa creadora, con Alfredo Medina y el equipo que les circunda, con grandes amigos.

En Mérida, los niños y jóvenes tienen su espacio con el Festival FICAIJ, que es cine infantil y juvenil de alcance internacional, promovido por los hermanos Céspedes, lleva siete ediciones y el de este año lo coordina Carolina Céspedes.

Karina Gómez lideriza el Festival de Cine Colombo-Venezolano también en Mérida y el Festival iniciático y pionero que es el Festival de Cine de Mérida (que acaba de premiar: El Amparo, ópera prima de Rober Calzadilla, con siete reconocimientos).

En Táchira Santiago Camargo y Rayn Díaz con el apoyo de la Fundación Sin Códigos ni barras, llevan a cabo el Festival de Cine y Video del Táchira. Allí se realiza también el Encuentro con Cinéfagos, dirigido por Alonso Vivas, que va por el VII en San Cristóbal, por la Universidad de Los Andes Núcleo Táchira y la Fundación Cultural Bordes con Fania Castillo y Otto Rosales, es Cine de Fronteras.

En el Centro del país:

En Caracas Bernardo Rotundo tiene diez años haciendo la Muestra de Cine Latinoamericano y otros ciclos sumamente importantes y de tradición, por su parte, el Ciclo de Cine de la Diversidad de más reciente creación, lo lleva John Petrizzeli. Otro de cine de la diversidad es el FESTDIVQ, de José Alirio Peña. Por su parte Winder Rivero lleva el Festival Valle Vivo. Orlando Corona organiza el Festival Ascenso ya con catorce años, Haydeé Chavero el Festival Caracas filminuto, y con dos ediciones el Gobierno del Distrito Capital ha organizado el Festival Internacional de Cine de Caracas. En Miranda la Muestra de Cine Penitenciario la organiza Alberto Alvarado.

En Valencia (Carabobo) y Maracay (Aragua) está el Festival Araca, el cual ya tiene cuatro (4) ediciones, tiene carácter de concurso y tienen cantidad de renglones, incluyendo el de cine hecho por niños y jóvenes, y en la última edición el año 2016, les llegaron cantidad de trabajos del exterior por lo cual se proyectaron y consideraron, abriendo las puertas a esa nueva categoría en adelante. El FestiAraca ha sido creado y conducido por los hermanos Daniel y Sergio Siugza y su Movimiento Rabo de Nube.

El Encuentro con la Literatura y el Audiovisual para niños y jóvenes en Valencia lo coordinamos desde la Fundación La Letra Voladora, con participación de escuelas de todo el estado Carabobo, y este año cumplirá 12 años de existencia.

El Festival de Cine de Barquisimeto está en manos de Isabel Caroto, comenzó como un festival de cine de cortometrajes y desde hace dos años proyectan en concurso óperas primas venezolanas. Ramón Hernández dirige la Muestra de Cine y Video Cojedeño, y el Festival de Video de Yaracuy es organizado por : Marcos Bedoya y Miguel Charung.

En Costa Varguense tenemos la muestra de Audiovisual Cine Comunitario de Vargas organizado por José Wilfredo García. Y Carol Cáceres ha creado una muestra Ecoturística de cine y video.

Si nos vamos a Guayana está José Barceló, quien dándole continuidad y vida al Festival de Cine para Niños de Ciudad Guayana (nacido en 1989), Fundacin fue fundado por la pareja de Federico y Luisa de Genolet y Barceló creó además otras modalidades este año, como la Muestra de Cine Histórico de Angostura. Ramiro Mendoza realiza allí mismo en la región el Festival de Guayana en cortos. Hay además un Festival que lleva siete años haciéndose y es el Festival de la espiritualidad en el cine venezolano, organizado por Néstor Briceño y José Ángel Casanova.

En el Oriente:

En Anzoátegui El Festival de Cortometraje Comunitario de Barcelona,  lo coordina: Alexander Campos. Por su parte Luis Cerasa conduce el Festival de Documentales Clemente de la Cerda desde hace seis años. «Secuencias» también de Anzoátegui, es responsabilidad de la Escuela de Cine y Medios Audiovisuales (ECIMA) de Yluhibeth Ortíz y Fred Salazar. Por su parte Argenis Herrera organiza en este estado el Festival de cine independiente. En el estado Sucre tenemos a Ernesto González organizando el cine en Cumaná.

El Festival de Cine de Margarita y el Caribe que se realiza en Nueva Esparta es bianual  y lo organiza Amazonia Films. En la misma Isla de Margarita Hernán Troconis organiza el llamado Festival de Tiempos Cortos, que está dirigido a estudiantes.

En los Llanos:

En Apure el Festival de Cine Apureño José Natalicio Estrada conducido por Yelitza Rivas.

En el Guárico, el Festival UPAC lo organiza Bladimir Rodríguez en el Municipio Ortiz. En Portuguesa está Leonardo Figueredo organizando el Festival de Cine y Video Comunitario. En Monagas se hace el Festival de cine Secuencias, por iniciativa de Fred Salazar.

Ah, en Delta Amacuro tenemos otro Festival con ese estilo, es el Festival de Cine Comunitario Ka Sitaba Eku organizado por Eduardo Patriz. Y la muestra de cine indígena en Amazonas la organiza Edson Acero con su Colectivo Visión Sur Amazonas.

Ya perdí la cuenta con todo lo nombrado, pero es indudable que son muchos los eventos permanentes y las regiones y con una riqueza temática enorme. Ello ha hecho crecer, sin lugar a dudas, a la comunidad de cinéfilos nacional.

Mantener esta Red es sumamente importante y de igual modo el considerar el crecimiento de canales de comunicación entre todos. Lo ideal es igualmente el que los talleres sobre distintas áreas de oficios en el cine, como la creación de escuelas al respecto, sigan siendo un objetivo importante.

De hecho nos alegra sobremanera el trabajo de UNEARTE que tiene menciones hasta en Guión (de hecho participamos en un agradable y asistido foro en Cinemateca sobre el tema del guión, con Carlos Brito y Carlos Tabares, ambos profesores de la Mención en Guión de esa Universidad). Crecer en espectadores y creadores son logros importantes en nuestro cine y en esa vía se camina con ascenso indudable.

Brindemos pues, por estos logros. Y «pa’ trás, ni pa’ coger impulso».

Laura Antillano